“Nunca olvides que cuando estamos en silencio, somos uno. Y cuando hablamos somos dos”
Indira Gandhi
¿Qué es lo aprendido sobre el poder y la política en el espacio organizacional, con las personas que acompaño? Su experiencia.
El poder es transgresión – Mando y control
El poder como la dominación, la imposición de la voluntad de quien manda sobre la voluntad de otras personas, y la política, como la disciplina, el acto de generar normas por parte del dominante para obligar a que estas sean acatadas, es decir, la manifestación del poder ocurre en estos espacios a través de la jerarquía.
La imposición de la propia voluntad sobre la conducta es lo que en estos espacios se conoce como el poder. La dominación como “la probabilidad de encontrar obediencia, a través del premio y del castigo a un mandato determinado”.
En las organizaciones que acompañamos, el poder y la política se ejercen en todos los niveles jerárquicos de la empresa, quienes actúan de acuerdo con sus intereses para mantener o mejorar su posición.
En estos entornos vemos que las personas no están seguras, así que deben protegerse, estas formas de acción producen miedo a las consecuencias y no los empodera para expresar su voz, o compromiso con las acciones que se les pide.
Desde apsoluti los acompañamos a nuevas distinciones sobre lo que significa el poder y la política organizacional, para empezar a cerrar la brecha de la separación y mover a las personas a espacios de cooperación e integración, cambiando la vieja interpretación de que el poder es tomar el mando y el control, a empezar a actuar con conciencia, de que el poder, es el juicio de la capacidad para tomar acción y producir resultados.
Poder es pasar de las prácticas de la imposición, a la inspiración, movilizando el compromiso y la acción en los demás.
Poder, es la capacidad de producir confianza y reputación, a través del cumplimiento de las promesas que se declaran.
Poder de gestión y liderazgo de las personas, a través del desarrollo y el trabajo en equipo y de la coordinación impecable de las acciones.
Poder para cambiar los discursos, las prácticas, y el sentido de relevancia. También las acciones que se toman para cuidar de sus resultados.
La política como la generación de los acuerdos, prácticas, estándares que facilitan y cuidan de lo que le importa cuidar a la organización. ¿Claridad, sobre quién hace qué? ¿Quién tiene el poder de declarar o aclarar ciertas conversaciones? Quién es el cliente de qué y quién.